Conoce a Olivia

UNA NIÑA QUIEN RECUPERÓ SU CALIDAD DE VIDA GRACIAS A UN EQUIPO DE UN CENTRO CARDIACO CON LA VISTA PUESTA MÁS ALLÁ DE SU TRANSPLANTE

Olivia, de 5 años, está orgullosa de su logro más reciente: cruzar las barras para trepar sin ayuda. Es una niña curiosa, de buen corazón y muy aventurera. Es como muchas niñas de su edad a las que les encantan las princesas, la película Frozen y las mini muñecas LOL. Sin embargo, hay una gran cosa que la distingue de sus compañeras y es su héroe, el angelito Killian. La razón, dice ella, "es porque me dio su corazón".

En 2023, Olivia celebró el 5º aniversario de su trasplante realizado en el Centro cardiaco de Children's Health℠ en Dallas, el lugar al que ella llama el hospital del globo. También es el lugar donde los especialistas de neurodesarrollo cardiaco del equipo de cuidados de Olivia se aseguraron de que el daño provocado por una anomalía congénita en su corazón no causara daños permanentes en su cerebro.

LAS CIRCUNSTANCIAS CRÍTICAS DE UNA RECIÉN NACIDA

Dos días después del nacimiento de Olivia, sus padres se encontraron completamente inesperados cuando le diagnosticaron estenosis de la válvula aórtica en el hospital donde había nacido.

Esta enfermedad se caracteriza por un estrechamiento de la válvula de la aorta, la arteria principal del cuerpo que se ramifica en el corazón. Este estrechamiento impide que la aorta se abra completamente, reduciendo el paso de la sangre al cuerpo y haciendo que el corazón trabaje más.

Además, sólo funcionaba una de las tres valvas de la aorta, unas aletas que impiden que la sangre se vuelva a filtrar al corazón.

Cuando Olivia fue trasladada a Children's Health al cumplir una semana, ya había sobrevivido a una parada cardiaca, a una hora entera de compresiones torácicas para resucitarla, a unos tubos implantados en el pecho para poder conectarla a una máquina de soporte vital y a una hemorragia cerebral.

Su caso era tan complejo y había llegado a ser tan grave que un grupo de 40 cirujanos de Children's Health y UT Southwestern se reunieron para hablar de los siguientes pasos y posibilidades. Decidieron intentar una sustitución valvular de riesgo extremadamente alto, un esfuerzo de última oportunidad para salvar el corazón de Olivia antes de que necesitara un trasplante de corazón de un donante.

Durante su recuperación de la operación, justo cuando la estaban desconectando de la máquina de soporte vital y le cerraban el pecho, sufrió tres infartos que le enviaron coágulos de sangre al cerebro.

Al final, la operación de implantación de una válvula no sería viable a largo plazo, por lo que Olivia fue puesta en la lista de espera de trasplantes para recibir un corazón nuevo.

Y por si la noticia de un trasplante de corazón no fuera suficientemente preocupante, a sus padres, Jacqueline y Miguel, les dijeron que su hija probablemente crecería con debilidad en un lado del cuerpo, problemas de visión y retrasos cognitivos.